domingo, 7 de junio de 2009

Andrés larroque

Andrés Larroque Nació en 1977. Comenzó a militar en el Colegio Nacional de Buenos Aires a los 13 años. Fue presidente del Centro de Estudiantes en el año 1996 tras ganarle las elecciones a Franja Morada, que nunca volvió a ganar una elección en dicho establecimiento hasta la fecha.
Tras esa experiencia estudiantil, una vez egresado del secundario, decidió ir a militar a las villas del sur de la Ciudad. Impulsó la creación de comedores comunitarios en el marco del desamparo que vivían miles de habitantes del sur en tiempos del menemismo. Así nació el Centro Comunitario “La Escuelita” en medio de la Villa 20 de Lugano. Esa experiencia se replicó en distintos barrios del sur y también en algunos barrios del conurbano bonaerense.
En el 2001 formó parte del Frente Nacional contra la Pobreza (FreNaPo). Experiencia que posibilitó la síntesis de distintos grupos sociales con una experiencia similar en el a zona sur de la Ciudad. Así nació, tras las jornadas del 19 y el 20, el Frente Barrial “19 de Diciembre” formado por compañeros de Lugano, Bajo Flores y Soldati.
Con la llegada de Néstor Kirchner al gobierno, decidió conformar un espacio juvenil que aportara al proyecto político iniciado, recuperando las banderas históricas de la Juventud Peronista. Así nació Juventud Presente, agrupación que bregó por la unidad y recuperación de los espacios juveniles del peronismo en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires.
Esa experiencia lo llevó a ser parte del proceso de gestación de La Cámpora, de la cual hoy es Secretario General. La Cámpora nuclea, al día de hoy, compañeros de todos el país comprometidos con el proyecto político que encabeza la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner y con la recuperación de la militancia colectiva como forma unívoca de la participación política.
Hoy es candidato a Diputado Nacional por la Ciudad de Buenos Aires en la lista del Proyecto Nacional.

sábado, 30 de mayo de 2009

a 40 años de un hito político social de nuestra historia

Rosariazo-Cordobazo-Rosariazo

Hace 40 años, en el año 1969, se produjo un Hito Político Social del proceso de construcción insurreccional popular que tuvo como lugares neurálgicos a la ciudad de Rosario y a la ciudad de Córdoba, y se sintetiza en la tríada de hechos Rosariazo-Cordobazo-Rosariazo.

Este “golpe de los excluidos”, este alzamiento de los obreros, los estudiantes, los profesionales y los pequeños y medianos empresarios industriales, vino a dar por tierra la utopía de la aristocracia financiera y de las empresas multinacionales de destruir el tejido productivo y social nacional, destruir el entramado de organizaciones que lo sostenía, e imponer su proyecto privatista y excluyente mediante el disciplinamiento del pueblo través de la represión en manos de la dictadura militar de Onganía y Krieger Vasena.

Las huelgas políticas de masas de 1969 nos enseñan que la alianza estratégica para llevar adelante un proceso de transformación nacional y social en la Argentina es entre el movimiento obrero y el movimiento estudiantil, en conjunto con los trabajadores profesionales y técnicos, ocupados y desocupados, el pequeño y mediano empresariado nacional, el cooperativismo, los pequeños productores.

Esta alianza estratégica del movimiento obrero y el movimiento estudiantil, y ese sujeto histórico sintetizado como pueblo, derrotó las represiones y provocaciones del régimen que tuvo entre sus páginas más oscuras el asesinato del estudiante Cabral en Corrientes y del estudiante-obrero Bello en Rosario. A las provocaciones para dividir al pueblo, para que ciertos sectores tomen los caminos fáciles, para exaltar cierto vanguardismo infantil que rompe con los tiempos de las mayorías, el pueblo respondió con unidad, organización, solidaridad, inteligencia y lucha.

Esto permitió responder a la represión y a la provocación de la dictadura en función de los intereses de los grandes grupos económicos concentrados, con una gesta histórica que retomó el camino de la construcción del proyecto nacional, popular y latinoamericano y recreó una nueva síntesis histórica, terminando con la proscripción, la dictadura de la aristocracia financiera y los planes de “modernización excluyente”.

En esta nueva oportunidad histórica que vivimos, en esta nueva hora americana, es central reconstruir la alianza estratégica movimiento obrero-movimiento estudiantil, y profundizar los grados de organización popular hacia la conformación de una nueva síntesis histórica.

Sólo de esta manera podremos profundizar el proceso de transformación nacional popular y latinoamericano, defender las conquistas que obtuvimos a los largo de estos años de lucha, retomar banderas olvidadas y derechos sociales aplastados a partir de la dictadura de 1976 y la destrucción de los 90’, y hacer frente a las provocaciones y operaciones de los que quieren dividirnos para llevarnos nuevamente al proyecto de la miseria, la pobreza y la exclusión.
Gabriel Merino
Sec. de Relaciones Internacionales de la FUA
Sec. de Extensión de la OCLAE
MILES

miércoles, 15 de abril de 2009

¿ Qué es ser progresista?

Por Andrés Larroque *
Se acercan las elecciones y en la ciudad de Buenos Aires se repiten las mismas melodías que, tras varios comicios, nos han llevado a la situación actual: la derecha en el gobierno, atendida por sus propios dueños.
Vuelven a invocarse las palabras “progresista”, “amplitud”, “centroizquierda”, etcétera. Ahora bien, ¿qué será ser progresista? Se pueden dar muchas definiciones, pero hay un elemento que no debe pasarse por alto. Se trata de un argumento incontrastable: se es progresista –o no se es– siempre frente a un contexto determinado, en función de las acciones que en ese contexto desarrollan tal fuerza política o tal dirigente.
Tristemente, la realidad política de la ciudad (x capital federal) no termina de reconocer esta cuestión. Aquí el mote de progresista es algo que viene dado, se es progresista en abstracto. Se es progresista si se tiene un tono de voz mesurado, si las convicciones se defienden hasta el punto de no ofender ningún interés, si –por supuesto– se mantiene la mayor distancia posible de esa “enfermedad” argentina que se llama peronismo. En definitiva, se es progresista si no se hace nada; ni bueno, ni malo.
Los porteños hemos visto claramente el resultado de esta política. Esta concepción fue gobierno en la ciudad durante seis años. Por acción o inacción, por falta de audacia o desinterés hacia los sectores populares, esa concepción terminó causando un notorio desencanto del electorado porteño con la forma de gobierno del progresismo. Los errores de esos seis años fueron los que dejaron el campo abierto para que la derecha ganara en la ciudad. Una derecha que no tiene nada de tímida, ni de mesurada; por el contrario, gobierna de acuerdo con sus intereses y su base social.
En suma, ignorar la responsabilidad del pseudo progresismo en la llegada definitiva del gobierno que hoy padece la ciudad es tapar el sol con un dedo y seguir jugando a las escondidas en un distrito clave por su influencia nacional. Como señalaran la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, y el ex presidente Néstor Kirchner, el sentido de las próximas elecciones trasciende la realidad local. Se trata de plebiscitar un modelo en los albores de una crisis internacional de dimensiones aún desconocidas. Este es el contexto en el que se define quién es progresista y quién, en todo caso, es reaccionario, retardatario y antipopular. Este es el contexto en el que los argentinos tenemos que definir si ratificamos el rumbo de un proyecto que comenzó a caminar en 2003 y que, por las profundas transformaciones realizadas en la Argentina, ya nos permite hablar de un modelo.
Haber reconstruido la Argentina; la institucionalidad, la economía, los valores democráticos, la Justicia, la dignidad nacional, la producción y el trabajo como pilares del desarrollo, entre tantos logros, no ha sido gratis. Una derecha new age organizada y construida desde los medios de comunicación, con las mismas concepciones de 1880, se ha puesto como objetivo innegociable terminar lo antes posible con este proyecto, con este modelo. Mientras tanto, los amigos “progresistas” miran el techo y deshojan la margarita de la mezquindad para ocupar media banca más. Quieren recuperar el espacio político que perdieron con los dos últimos gobiernos de la Argentina. ¿Por qué Cristina y Néstor ganaron el espacio que habían perdido los autoproclamados progresistas? Simplemente por el hecho de hacer lo que aquéllos proclamaron en infinidad de ocasiones y nunca realizaron.
Se es progresista si se defiende este modelo. Esta es la discusión que hay que dar con sinceridad, sin mezquindades, ni especulaciones. El juego de la escondida, en la ciudad, ya sabemos cómo termina. Ahora tenemos la oportunidad de comenzar un camino distinto que signifique defender el proyecto político que ha transformado la realidad del país y que abre una opción de futuro. Todo lo otro, lamentablemente, ya lo conocimos.
* Secretario general de La Cámpora.

domingo, 29 de marzo de 2009

Cristina reafirmó el rol del Estado

La Cumbre de Líderes de Países Progresistas culminó ayer en Chile con una sentencia implacable de la Presidenta Cristina Fernández: “En esta etapa de la crisis inédita, el Estado tiene que cumplir un rol activo, porque el mercado está nocáut y le están contando. Y ya van por el número nueve”. Durante veinte minutos, expresó la necesidad de “retornar a una democratización y, fundamentalmente, retornar a un mundo donde las reglas sean respetadas por todos los países que integran los organismos multilaterales.”.........

DUHALDE ESTÁ DETRAS DE TODO



Fue el análisis que Roberto Backman titular del Centro de Estudios de Opinión Publica (CEOP) hizo hoy en la 98.5 del proceso eleccionario para el 28 de junio.
Aseguró que "Duhalde está detrás de todo, pero como se ha transformado en un piantavotos, tiene que operar de atrás de los gruesos cortinados que lo oculten, pero su esposa Chiche Duhalde lo dijo", sostuvo Backman.
En diálogo con el periodista Horacio Embón analizó Backman que "De Narváez solamente se puede adueñar de la provincia de Buenos Aires, porque la Constitución no lo deja ser candidato a presidente de la Nación, pero a Solá no lo compró, en ese caso pesó más el enojo".
Calificó lo de Solá, aliado políticamente con Macri y De Narváez como "un suicidio político, porque dejó el primer lugar en el FpV para ser segundo en una lista sábana enorme, no es una buena decisión", dijo.
"A futuro, De Narváez quiere ser gobernador de la provincia en 2011 y Solá presidente, lo cual termina desfavoreciendo al segundo", explicó.
"Lo de ayer muestra a Macri, por encima de todo esto, es el otro precandidato para 2011, con una Gabriela Michetti que va a hacer una muy buena elección y lo que va a permitirle al jefe de gobierno porteño, sobrevolar la campaña de De Narváez", acotó.
"Hubo gente que ha sido mas acomodaticia, o pragmática que ideológica, y hoy pareciera que empezamos a recorrer el camino inverso, algo lógico y necesario, si queremos ver partidos políticos fuertes, necesarios para la democracia", dijo.
"Las características necesidades y posibilidades se dieron de esta manera", dijo al analizar los aristas de esta campaña. “ Kirchner quiso instalar a la gestión como cuestión esencial y muestra al actual gobierno como continuidad del suyo", indicó.
"Tomado de esta manera son seis años de gestión, que confrontan con el modelo populista de derecha que encarnan De Narváez y Macri, o aquel que propicia la CC con el Cobismo, y en algunos distritos con el socialismo", aseguró.
"Siendo una elección de medio término - que son de gobernabilidad para los que están en la gestión - le agrega un condimento de plebiscito que incorpora el titular del justicialismo nacional", afirmó.

lunes, 23 de marzo de 2009

TODOS A LA PLAZA DEL PUEBLO


Alejandro Dolina: "Hay una gigantesca manipulación medíatica"


El escritor y conductor de radio aseguró que "por eso a veces la gente no opina lo que sale de su apreciación sino de lo que escucha" y agregó que le "parece bien" el proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. “Servirá para terminar con los monopolios y con una ley de la dictadura", sostuvo.

El escritor y conductor radial Alejandro Dolina aseguró ayer que en la actualidad "hay una gigantesca manipulación mediática" por lo que dijo que le "parece bien" el proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. "El proyecto servirá para terminar con los monopolios y con una ley de la dictadura", aseguró Dolina al final del acto en el que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el nuevo proyecto en el teatro Argentino de La Plata.
"En la actualidad hay una gigantesca manipulación mediática y por eso a veces la gente no opina lo que sale de su apreciación sino de lo que escucha", agregó. El escritor afirmó que espera que el Congreso apruebe la nueva ley aunque, advirtió, "va a haber muchas objeciones porque la ley tiene asuntos técnicos, políticos y comerciales".